lunes, 19 de mayo de 2008

Comentario a:La Colombia polarizada

Por: Obeida Benavides, obeidabenavides@gmail.com

Lunes, 19 mayo, 2008 11:49 AM

Hola, Hugo. Tal vez no puedo aportar comparaciones, por carecer de elementos y, hasta vergonzosamente, de información que me permita establecer sutiles paralelos en la realidad nacional. Sin embargo, aprovecho la puerta que me abres para hacer pensamiento una sensación que me maltrata desde hace días.

Resulta que me he visto invadida por muchísimos correos, de diferente calidad, en los que el tema principal son Chávez, Correa, Uribe, las Farc y la parapolítica. Diferentes posiciones, algunas sustentadas en pensamientos lógicos irrefutables, otras con un humor ramplón que desdice desde el principio de la inteligencia de su creador. Algunos sentimentales, lacrimógenos casi, y otros agresivos. En fin, es una diversidad variopinta que habla por sí sola de la diversidad intelectual de sus creadores. Sin embargo, la constante es la misma: hay muchos que están invirtiendo su tiempo en crear documentos que reflejan (eso espero) su pensamiento acerca de las circunstancias políticas de mi país. Y entonces yo me pregunto: se convirtió la internet en la autopista del chisme de pasillo? Todos estos comentarios, chistes, reflexiones, llegan al oído del verdadero destinatario? Es decir, Chávez, Correa, Uribe, Farc y parapólíticos? De qué me sirve a mí que me lleven, ingenua yo, a un rincón de la red y me cuenten al oído la razón por la cual Chávez aparece entre los animales más feos del planeta? No sería mejor decírselo en su cara? Y de que me sirve que alguien me secretee que los de las Farc son unos asesinos, si ese alguien no tiene el valor de decírselo a ellos? O con Uribe? O con cualquiera!

Es que la postura política no se sustenta en el chisme, el corrillo, el rumor. Sólo manifestaciones claras, firmes, de nuestra postura ante los mass media, nos permitirán asumir con responsabilidad el manejo de nuestro destino como país. Por ejemplo, yo ya apagué el televisor. No veo noticias, ni las oigo. Me rehuso a seguir siendo manipulada por los medios de información. Que renuncio a un derecho? Tal vez. Pero de que me sirve saber si es verdad o no el contenido del computador de Raúl Reyes? (Ya ves que a pesar de todo el mundo se me filtra por las rendijas de mi cueva autista). Creo en la democracia, ejercida libremente. Y desde mi trabajo, la proclamo. No creo en ninguno de los que ahora me gobiernan (es decir tienen el poder político en mi país, porque realmente sigo haciendo lo que me da la gana). Tengo fe en mi gente, y confío en mi intuición que todavía me permite reconocer la verdad en los ojos de las personas que me miran a la cara. En otras palabras: soy la reina del universo que me toca, soy la señora de mi castillo. Y le sugiero a aquellos que se han decidido por una labor política comprometida con el mundo que no se escondan en el anonimato del universo binario y planten la cara. Tal vez cuando yo vea sus ojos, me mueva con ellos, porque he leído en ellos la verdad.

Obeida Benavides

1 comentario:

Anónimo dijo...

Desde lejos de mi país he tomado desde hace muchos años atrás esa postura de dejar a un lado toda información que de una manera u otra quiera inmiscuirse en mi cerebro y acaparar toda posibilidad de raciocinio lógico.

Simplemente espero en la distancia y con esperanza, que algún día deje de correr la sangre por un negocio de algunos, y la pasividad de otros.